miércoles, 24 de abril de 2013

Martir Fortunato Arias Sánchez

Algunas personas os preguntaréis porqué el adoptar este nombre para nuestro proyecto. Es sencillo de responder.
Fortunato Arias Sánchez

Tras cursar estudios eclesiásticos en Murcia, Fortunato Arias Sanchez se ordenó sacerdote en 1918. Fue cura párroco en El Palmar (Murcia) y posteriormente ecónomo de la iglesia de la Asunción en Hellín y arcipreste. El inicio de la guerra le sorprendió en Hellín, que quedó en zona republicana. Fue encarcelado en agosto del 36 y ejecutado el 12 de septiembre del mismo año, en el marco de la persecución contra la Iglesia Católica que se desató en la retaguardia republicana. Andreu Nin llegó a decir:
La clase obrera ha resuelto el problema de la Iglesia, sencillamente no ha dejado en pie ni una siquiera [refieriendose a los templos] (...) hemos suprimido sus sacerdotes, las iglesias y el culto.
Andreu Nin. La Vanguardia del 2/08/1936 . Biblioteca de La Vanguardia.
Bien es cierto que era un clima de tensión con pocos antecedentes en España, e independientemente del bando político el sufrimiento y los ataques se ensañaban con el pueblo, católico o no.

Este es un fragmento de la carta que envió Fortunato a su hermano, poco antes de ser ejecutado, donde perdona la vida de quienes van a acabar con la suya:
Las cosas han cambiado notablemente desde mi última carta y hoy sospecho con sobrada razón que me quedan pocas horas de vida. Perdono a todos los que sean o hayan de ser los causantes o cómplices de mi muerte. Perdonadlos vosotros también, como nos manda la ley cristiana que profesamos. Que Dios acepte nuestros sacrificios y nuestra vida para que todos se conviertan y vivan. No recuerdo haber dado ocasión a que se me persiga, y me satisface pensar que la causa única de todo es mi carácter sacerdotal. [...]
No se si moriré aquí, pero, sea donde fuere, vosotros no teneis que venir aquí para nada. Ya os escribirán y os dirán lo que haya. [...] 
No tengáis ninguna pena por mi, encomendadme a Dios y quiera Él que nos juntemos en el Cielo[...]
Fortunato en su carta de despedida a su hermano Félix

Una de las cosas que nos llevó a decidirnos por tomar su nombre fue también por su vínculo con la Acción Católica en El Palmar, dando clase a un grupo de niños, de una forma muy similar a la que hacemos nosotros. Por todo esto nos asociamos con La Hermandad, la cuál lleva su nombre y trabaja en conservar, proteger y dar a conocer a Fortunato tras su beatificación en 2007.

La Hermandad, en esta labor ha llegado a Gurué en Mozambique donde, de la mano de D. Francisco Lerma obispo de la misma y natural de El Palmar, llevan a cabo envíos de capital para la labor social en dicha diócesis.

Francisco Lerma al comienzo de su misión 

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